En medio de la devastación provocada por las lluvias torrenciales en el sur de Brasil, un grupo de rescatistas voluntarios se ha movilizado para salvar a aproximadamente 20 perros atrapados en un edificio inundado en el estado de Rio Grande do Sul. Estos esfuerzos forman parte de una respuesta más amplia a las catastróficas inundaciones que han dejado al menos 100 muertos y 128 desaparecidos.
Los rescatistas, motivados por su amor hacia los animales, se organizaron rápidamente y equiparon una lancha con alimentos y agua potable para los canes. Durante sus recorridos, encontraron a un grupo de perros refugiados en el segundo piso de un edificio de difícil acceso. Inmediatamente les proporcionaron croquetas y comprobaron que, afortunadamente, ninguno de los animales presentaba problemas de salud graves. Entre los perros, uno de ellos se destacó por asumir el rol de líder, cuidando del resto del grupo.
Los activistas han expresado su esperanza de que el nivel del agua descienda pronto para poder trasladar a los perros a lugares más seguros. Mientras tanto, continúan vigilando las zonas más afectadas de Rio Grande do Sul en busca de otras mascotas y animales que puedan necesitar rescate.
Este acto de solidaridad y amor por los animales es un rayo de esperanza en medio de la tragedia que afecta a miles de personas en Brasil. Los rescatistas y activistas siguen trabajando incansablemente, no solo para salvar vidas humanas, sino también para proteger a las mascotas que forman parte de muchas familias.